"La Ramona es una puta, y echando polvos morirá", que diría cualquier natural de la tierra, y es que la sangre tira, así que quien dejó muertos en la cuneta en el pasado, aunque hoy sea recompensado a nariz tapada, volverá a aquellos nauseabundos andurriales.
El susodicho elemento es un parásito de lo más pernicioso, se agarra a su víctima a mandíbula hiriente y le extrae hasta el último atisbo de vida que tenga... incluso más, llegando a la necrofagia.
¡Huid!, el océano es proceloso, pero vuestro barco hace ya que arde.
El susodicho elemento es un parásito de lo más pernicioso, se agarra a su víctima a mandíbula hiriente y le extrae hasta el último atisbo de vida que tenga... incluso más, llegando a la necrofagia.
¡Huid!, el océano es proceloso, pero vuestro barco hace ya que arde.